Durante la oración del Ángelus, el Santo Padre recordó a los fieles que el domingo 11 de julio es el Domingo del Mar: “dedicado de manera especial a todos los que dependen de él para su trabajo y sustento”.
Celebrado anualmente, el Domingo del Mar, es un día para que la gente se reúna para rezar por los marinos y los pescadores y agradecerles el papel vital que desempeñan en todas nuestras vidas.
Como señaló el papa Francisco, también es un día en el que se destaca la importancia de cuidar el mar y su ecosistema.
Hablando después del rezo del Ángelus, el Papa dijo que reza por los marinos y exhortó a todos a cuidar los océanos y los mares.
“Cuiden la salud del mar: ¡no al plástico en el mar!”, dijo.
8 millones de toneladas de plástico entran en el océano cada año
Las cifras de la ONU muestran que 8 millones de toneladas de plástico entran en el océano cada año, matando la vida marina.
El Papa ha hecho muchas referencias a la necesidad de cuidar los océanos y los mares en su encíclica “Laudato sì, Sobre el cuidado de nuestra casa común”. En el párrafo 41, por ejemplo, dice: “Los océanos son el patrimonio común de la familia humana. Sólo con un profundo sentido de humildad, asombro y gratitud podemos hablar con razón del océano como “nuestro”.
Cuidar esta herencia común implica necesariamente rechazar formas de actuar cínicas o indiferentes. No podemos pretender ignorar los problemas de contaminación de los océanos derivados, por ejemplo, de los plásticos y microplásticos que entran en la cadena alimentaria y provocan graves consecuencias para la salud de la vida marina y humana. Tampoco podemos permanecer indiferentes ante la pérdida de los arrecifes de coral, lugares esenciales para la supervivencia de la biodiversidad marina y la salud de los océanos, mientras asistimos a la transformación de un maravilloso mundo marino en un cementerio submarino, desprovisto de color y vida”.
En una carta dirigida a los líderes empresariales en una conferencia del Vaticano de 2018 sobre la cuarta Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, dijo: “No podemos permitir que nuestros mares y océanos estén llenos de campos interminables de plástico flotante.
Tenemos que rezar como si todo dependiera de la providencia de Dios, y trabajar como si todo dependiera de nosotros”, dijo el Santo Padre en esa ocasión.
Nota y Foto: Vatican News.
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