10 mayo, 2024

El Papa a niños africanos: «Luchen por la paz, la humanidad está en peligro»

Francisco recibió en audiencia a un grupo de niños de todo el continente con motivo del Día de África: «En sus países hay corrupción, malos gobiernos, migraciones, terrorismo, crisis climática. A veces se sienten impotentes y desanimados, pero son jóvenes y llevan dentro muchos talentos. Sigan los grandes sueños».

Los sueños de los jóvenes contra el mal gobierno de los grandes, las ambiciones contra la corrupción, los talentos contra el terrorismo, el deseo de paz contra las guerras y los conflictos que ponen «nuestra humanidad en peligro». No se desanimen, incluso cuando se sientan «impotentes», sigan siempre «los grandes sueños», dijo el Papa a un grupo de niños de todas las naciones de África, recibidos en el Vaticano en el Día de África, la conmemoración anual de la fundación de la Unión Africana, el 25 de mayo de 1963.

Ser «diferentes»

«Me alegro de verlos», dijo Francisco a los chicos acompañados de padres y embajadores. «Son el signo de esta rica diversidad cultural», añadió, recordando cómo precisamente este día «representa el símbolo de la lucha de todo el continente por la liberación, el desarrollo y el progreso económico y social, así como por la valorización y la profundización del patrimonio cultural africano».

Los invitó a tener la audacia de ser «diferentes», de dar testimonio de la belleza de la generosidad, del servicio, de la pureza, del valor, del perdón, de la lucha por la justicia y el bien común, del amor a los pobres, de la amistad social.

Vivir la paz a nuestro alrededor y en nuestro interior

Junto a esto, Francisco pone ante los ojos de los jóvenes africanos «uno de los grandes desafíos de la vida»: la lucha por la paz. «Ustedes lo saben bien -dijo-, estamos atravesando tiempos difíciles, con nuestra humanidad en peligro. No sólo Ucrania, en Europa, sino también todos los conflictos y divisiones fratricidas que asolan África, Asia y Oriente Medio desde hace años. “Estamos en grave peligro”», advirtió el Papa.

Por tanto, vivan la paz a su alrededor y en su interior. Sean embajadores de la paz, para que el mundo redescubra la belleza del amor, de la convivencia, de la fraternidad, de la solidaridad.

No desanimarse ante los desafíos

Recordando las palabras que ya había pronunciado en su viaje de enero y febrero pasados a la República Democrática del Congo y a Sudán del Sur, el papa Francisco examinó a continuación los «enormes desafíos» a los que se enfrenta la «querida tierra africana». Los nombra uno a uno: Terrorismo, mala gobernanza, corrupción, desempleo juvenil masivo, migraciones, conflictos intercomunitarios, crisis climática y alimentaria. Un contexto tan dramático que podría llevar a los jóvenes a sentirse impotentes y desanimados, y a decirse a sí mismos que «el futuro es sombrío y sin perspectivas».

«Pero ustedes son jóvenes, llevan dentro muchos talentos, cultivan grandes ambiciones, tienen grandes sueños: ¡sigan los grandes sueños!. Queridos amigos, esto es lo que me gustaría decirle a cada uno de ustedes: nunca renuncien a sus sueños, nunca entierren definitivamente una vocación, nunca se ridan».

«Amigos» de los niños soldados y de las víctimas de la guerra

No rendirse nunca, insiste el Papa. «Una de las riquezas de África es la aguda inteligencia de sus jóvenes. Que su empeño en los estudios contribuya al desarrollo humano e integral de la sociedad». Y denunciando el drama de los «niños soldados», así como de los «niños víctimas de todo tipo de conflictos», el Papa recomendó estar cerca de ellos porque «necesitan de su amistad, para que no se sientan rechazados y estigmatizados».

Cerca de los ancianos

Por último, Francisco dio otra recomendación muy importante, la habitual en cualquier diálogo con las nuevas generaciones: «Déjense iluminar por los consejos y testimonios de los ancianos. El diálogo con las raíces, con los ancianos, con los que vinieron antes que nosotros, nos permite avanzar».

Crédito de la nota: Vatican News.